SOBRE
EL
OFFICIUM
DEFUNCTORUM
DE
CRISTÓBAL
DE
MORALES
Dentro del ritual católico del siglo XVI, el Officicum Defunctorum (u Oficio de Difuntos) consistía en una compleja celebración articulada a través de una serie de rituales litúrgicos. De este modo, la muerte se convertía en un motivo para celebrar la vida y, por extensión, en un espacio de reflexión sobre la propia existencia del ser humano. Así pues, más allá de la función de los propios ritos religiosos, la creación de la música para estos actos permitía la compositor expresar sus más íntimas inquietudes existenciales.
En 1544 Cristóbal de Morales (Sevilla, 1500‐ Málaga, 1553) publica su Officium Defunctorum, obra que ilustra perfectamente su posicionamiento sencillo y sombrío acerca de la muerte. A través de esta composición musical, Morales nos ofrece un profundo lamento que entronca con la concepción dramática y tétrica que impera en el colectivo social español de la época, al tiempo que evidencia la clara influencia de la Escuela Flamenca en su lenguaje sonoro, especialmente del compositor holandés Josquin de Prez. El resultado es un conjunto de piezas musicales de corte vertical y fuerte sentido homorrítmico, que permiten una mayor fluidez en el desarrollo y comprensión del texto, al tiempo que aporta una luminosidad sorprendente tratándose de música para actos fúnebres.
Versión de Officicum Defunctorum Cristóbal de Morales interpretado por Herpèrion XX (Dirección: Jordi Savall): http://youtu.be/_6zAGn5Z6S0
SOBRE EL PROYECTO INTERDISCIPLINAR
El objetivo del presente proyecto es crear un espacio colectivo donde sea posible articular diversos lenguajes artísticos. De este modo, el Officicum Defunctorum de Cristóbal de Morales se convierte en la excusa y punto de partida para posibilitar un encuentro de creación artística entre creadores de distintas disciplinas. Factores como formato del evento, intención conceptual o posibilidades de líneas futuras, son aspectos que quedan abiertos y, esperemos, perpetuamente inacabados.
Entre estos otros artistas se está barajando la posibilidad de trabajar junto al colectivo británico ATOI.
La Fragua Espacio de Arte, en Belalcázar (Córdoba) será el espacio dónde se estrenará la versión más completa de esta apuesta interdisciplinar.
Dentro del ritual católico del siglo XVI, el Officicum Defunctorum (u Oficio de Difuntos) consistía en una compleja celebración articulada a través de una serie de rituales litúrgicos. De este modo, la muerte se convertía en un motivo para celebrar la vida y, por extensión, en un espacio de reflexión sobre la propia existencia del ser humano. Así pues, más allá de la función de los propios ritos religiosos, la creación de la música para estos actos permitía la compositor expresar sus más íntimas inquietudes existenciales.
En 1544 Cristóbal de Morales (Sevilla, 1500‐ Málaga, 1553) publica su Officium Defunctorum, obra que ilustra perfectamente su posicionamiento sencillo y sombrío acerca de la muerte. A través de esta composición musical, Morales nos ofrece un profundo lamento que entronca con la concepción dramática y tétrica que impera en el colectivo social español de la época, al tiempo que evidencia la clara influencia de la Escuela Flamenca en su lenguaje sonoro, especialmente del compositor holandés Josquin de Prez. El resultado es un conjunto de piezas musicales de corte vertical y fuerte sentido homorrítmico, que permiten una mayor fluidez en el desarrollo y comprensión del texto, al tiempo que aporta una luminosidad sorprendente tratándose de música para actos fúnebres.
Versión de Officicum Defunctorum Cristóbal de Morales interpretado por Herpèrion XX (Dirección: Jordi Savall): http://youtu.be/_6zAGn5Z6S0
SOBRE EL PROYECTO INTERDISCIPLINAR
El objetivo del presente proyecto es crear un espacio colectivo donde sea posible articular diversos lenguajes artísticos. De este modo, el Officicum Defunctorum de Cristóbal de Morales se convierte en la excusa y punto de partida para posibilitar un encuentro de creación artística entre creadores de distintas disciplinas. Factores como formato del evento, intención conceptual o posibilidades de líneas futuras, son aspectos que quedan abiertos y, esperemos, perpetuamente inacabados.
Entre estos otros artistas se está barajando la posibilidad de trabajar junto al colectivo británico ATOI.
La Fragua Espacio de Arte, en Belalcázar (Córdoba) será el espacio dónde se estrenará la versión más completa de esta apuesta interdisciplinar.
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